1.6.07

Ropa sucia


Por Susana Martín Gijón.
¿Te has preguntado alguna vez de dónde procede la ropa que te compras? ¿dónde y cómo se fabrica?

Si lees las etiquetas de tu ropa, verás que mucha de ella se ha producido en países asiáticos, o en Marruecos, o en Europa del Este... pero no verás nada sobre las condiciones en que se ha elaborado:

demasiadas horas de trabajo al día, salarios que no dan para vivir, represión sindical, explotación infantil, malas condiciones de seguridad e higiene...

Y es que las marcas de ropa trasladan la producción allí donde la mano de obra les resulta más barata. Es lo que se conoce como deslocalización, uno de los efectos más sangrantes de la cara fea de esa globalización en la que nos encontramos inmersos.

El mundo de la moda tampoco respeta tu salud ni la del medio ambiente. Así, es habitual el uso de sustancias tóxicas en la ropa o en las zapatillas de deporte: formaldehído, tintes con plomo, estampados que contienen nonilfenoles, PVC... ¿Suenan mal? ¡Pues son aún peores!

¿Qué puedes hacer tú?

Elige tejidos y tintes naturales.
Fíjate en la composición de las prendas antes de comprarlas o pregunta en la tienda.

Opta por ropa de comercio justo.
Gracias a los criterios exigidos para los productos de comercio justo, te aseguras no sólo que no se han violado los derechos laborales, sino que se está pagando un precio justo por aquello que compras, que ayudará a los productores a salir de las situaciones de pobreza en que se encuentran inmersos en gran parte consecuencia del comercio convencional.

Averigua qué hay detrás de tu ropa.

Entra en webs de marcas de ropa y de zapatillas deportivas y pregunta por las condiciones laborales de las personas que confeccionan sus prendas.

Si quieres más información, puedes visitar la web de la campaña Ropa Limpia, que es una campaña internacional que tiene como principal objetivo mejorar las condiciones laborales dentro de la industria mundial textil, de forma que no se violen los derechos laborales de las personas que confeccionan las prendas que después nosotros compramos en las tiendas. Ahí encontrarás información sobre algunas de las empresas más irresponsables con las personas y con el medio ambiente.

Y por último y no menos importante...
No caigas en un consumo incontrolado, y totalmente innecesario. Cuando vayas a comprarte una prenda, piensa si realmente la necesitas.
Que la moda no te controle a ti, contrólala tu a ella!